La pandemia vino a trastocar todo y la industria automotriz no ha sido la excepción, por lo que por un lado la producción de autos nuevos se paralizó durante un tiempo y esto a su vez desencadenó en una serie de situaciones que ha puesto de cabeza a esta pujante industria, dentro de lo que está el cambio en los paradigmas de diseño y fabricación de los nuevos modelos.

Todo el que de una manera u otra se encuentra inmerso en el mercado de compra y venta de vehículos y también porque no, los consumidores finales, esos adquirientes que esperan con ansías en muchas ocasiones a que en mercados como la República Dominicana, los Dealers que importan los carros usados desde los Estados Unidos, puedan tener un inventario atractivo y que tengan disponible aquellos modelos que son de su interés, ya sea para tener su primer auto o simplemente porque ya desean tener uno de fabricación más reciente.

El tema de los altos costos de los autos usados en los Estados Unidos, por efecto principal de la pandemia, pero que sujeto a esto se ha derivado un efecto de la tecnología, y muchos tal vez dirán que la tecnología ha venido a reactivar y cambiar la forma y agilizar, sin embargo, también fruto del Covid-19 las industrias fabricantes de chips, que se utilizan como cerebro en las funciones de las diversas piezas fundamentales de los vehículos de motor, se vieron sumidas en altas demandas de peticiones, y no precisamente de los fabricantes de vehículos, sino más que todo de otros fabricantes, como de laptops, computadoras, celulares y otros dispositivos, por el hecho de que las personas al estar muchos trabajando desde sus casas, tuvieron que agenciarse la compra de este tipo de dispositivos, para realizar los mismos.

El alto costo de los vehículos usados

Resulta que luego de la reactivación rápida para muchos de la industria automotriz, para la fabricación de los nuevos modelos, se requería de los chips, pero resulta que los fabricantes de chips tenían una alta demanda, por lo que no podían suplir la necesidad de esta industria, provocando aún mayores retrasos que los ya vistos por causa de la pandemia en un principio.

Aunque los más confiados entienden que este problema que ha provocado alzas considerables en un sector de tanta importancia como lo es el mercado de vehículos usados, que consideran que en unos cuantos meses la industria debería estar al día y los precios volverán a sus estados anteriores, lo que muchos ven con beneplácito, pero no es menos cierto que hay otras interrogantes que rodean no solo al sector de carros usados, sino a la industria en general, y son los grandes cambios auspiciados sobre todo por la implementación de nuevas tecnologías y cambios en las funcionalidades de los mismos, que podrían también tener un impacto no tan solo en el tema de precios, sino en otras aristas.